La IA está redefiniendo el presente de las organizaciones: cambia estructuras, acelera decisiones y exige nuevas capacidades. El 70% de los líderes empresariales a nivel mundial prevén que esta tecnología cambiará sus funciones principales en los próximos tres años.
El entorno global de negocios está experimentando una evolución profunda impulsada por la Inteligencia Artificial. En Latinoamérica, comenzó a ser una prioridad tanto para empresas grandes como pequeñas. Según datos del Banco Mundial, un 66% de los ejecutivos de la región prioriza la contratación de candidatos con competencias en IA por encima de aquellos con más experiencia pero sin conocimientos en esta área. Este fenómeno responde a la creciente demanda de habilidades digitales avanzadas y la necesidad de adaptarse rápidamente a los cambios tecnológicos. En particular, sectores como la banca, las finanzas y los servicios de atención al cliente están experimentando una transformación acelerada, y las mujeres y los jóvenes ocupan un lugar cada vez más destacado en estos cambios.
A nivel organizacional, el impacto de la IA es notable. Un artículo de Harvard Business Review destaca que el costo de integración de herramientas -como el modelo GPT-4 de OpenAI- disminuyó más del 99% en los últimos 18 meses, lo que logró democratizar el acceso a tecnologías avanzadas. Esto permite a empresas de todos los tamaños incorporar soluciones innovadoras que antes solo eran accesibles para las grandes corporaciones. En este contexto, las empresas argentinas deben enfrentar el desafío de integrar esta tecnología sin perder de vista la importancia de la capacitación y la adaptación cultural de sus equipos.
Rodolfo Armelini, vicepresidente y director general de Kyndryl para América Latina y el Suroeste, reflexiona: ‘La IA es mucho más que una herramienta que mejora la productividad, es un motor de transformación que tiene el potencial de redefinir las estructuras organizacionales. Sin embargo, su adopción no depende únicamente de la tecnología, sino de la capacidad de las empresas para desarrollar las competencias adecuadas en sus equipos’.
El reciente informe People Readiness Report, indica que 3 de cada 10 líderes coinciden en que no están seguros de que su organización comprenda cómo abordar las carencias de habilidades y que la organización no comprende las habilidades que necesitarán los empleados en el futuro. Sin embargo, es importante destacar que el 76% de los líderes prioriza la capacitación interna sobre la contratación de nuevos empleados.
‘La integración de la IA debe ser un proceso estratégico que no solo se enfoque en las herramientas, sino en la cultura organizacional, promoviendo la innovación desde adentro. En Argentina, el verdadero desafío radica en preparar a nuestros profesionales para liderar este cambio y aprovechar al máximo el potencial de la IA’, concluyó Armellini.
La implementación de la IA en las empresas argentinas representa una oportunidad única para mejorar la competitividad y la eficiencia. Sin embargo, para que esta transición sea exitosa, será crucial que las organizaciones inviertan en tecnologías avanzadas y en el desarrollo de sus equipos humanos. La demanda de este tipo de habilidades está en auge, y aquellos que logren adaptarse rápidamente y fomentar una cultura de aprendizaje continuo estarán mejor posicionados para liderar en el futuro cercano.